< Volver a la página de noticias de RITA
¿Cuánto le cuestan los fumadores al sistema de salud?
21 de febrero de 2019
Las cifras del costo económico de tabaquismo han sido documentadas principalmente en países de ingresos altos, mientras que las cifras en países en desarrollo -donde más se presenta la epidemia- no son claras. Es por eso que los autores de "Global economic cost of smoking-attributable diseases" (Goodchild et al, 2018) tenían como objetivo calcular el costo sobre el sistema de salud de las enfermedades atribuibles al tabaquismo al rededor el mundo.
Para lograrlo, los autores toman los costos que inciden sobre las finanzas de los sistemas de salud. Es decir, los costos asociados desde el diagnóstico de la enfermedad hasta el tratamiento de ella. Aunque los autores tienen presente que hay otros costos, por ejemplo, el de pérdidas de inmuebles por incendios causados por cigarrillos, deciden no incluirlos precisamente porque la perspectiva del ejercicio se hace desde el punto de vista del sistema de salud.
Los autores aclaran que una de las limitaciones del estudio es que no se calcula el costo asociado a humo de segunda mano ni las formas de tabaco sin humo. Teniendo en cuenta que los daños del humo de segunda mano son bastante altos y que las formas de tabaco sin humo son muy populares en ciertos países, hay que tomar nota de la subestimación inherente a la cifra obtenida. Sin embargo, las estimaciones que aporta son un insumo para que los países reconozcan la gravedad de este tema.
El estudio recoge datos de 152 países con representación del 97% de los fumadores mundiales. Los resultados se presentan con la tasa de paridad de poder adquisitiva (PPP) de 2012 para asegurar que se puedan hacer comparaciones entre países. Los resultados son alarmantes: los gastos en salud por esas enfermedades totalizan (PPP) $467 billones ó (USD) $422 en 2012. Lo anterior equivale al 5,7% del total de gasto en salud del mundo.
En conclusión, fumar pone una gran carga al presupuesto de salud y, esto es aun peor es países donde la epidemia es más avanzada. Por eso, este estudio reitera la necesidad de que los gobiernos nacionales implementen –si no lo han hecho- o aumenten –en caso de que este rezagado- el impuesto al tabaco. Al ser la medida más efectiva para reducir el consumo, el impuesto al tabaco debería ser una prioridad en las agendas de política de salud a nivel global; pues con esta medida podrán liberar gran parte del presupuesto nacional que es destinado a cubrir los gastos en salud producidos por esta epidemia.
No debería esperarse a que se expanda el problema para tomar acciones. Se debe tener en cuenta que estas enfermedades (y los costos que conllevan), son en buena parte prevenibles. En los países en vía de desarrollo, se convierte en una oportunidad para redireccionar el presupuesto hacia otros programas de salud pública que respondan a las urgencias particulares de sus regiones.